Existen multitud de plagas y enfermedades que pueden afectar a nuestros huertos y frutales ecológicos. Pero las técnicas usadas en agricultura ecológica, muchas de ellas basadas en volver a técnicas tradicionales de antes de la revolución verde (rotación de cultivos, fertilización orgánica, biodiversidad, etc), y otros, fruto del estudio científico del comportamiento y biología de plagas y enfermedades, hace que a día de hoy ya se haya superado la idea de que los cultivos ecológicos no pueden ofrecer las mismas producciones y con costes similares que los convencionales.
Se trata de entender que hacer cultivos ecológicos significa obtener una producción en un entorno que debemos alterar lo menos posible para no romper los equilibrios que se dan de forma natural entre cada grupo de insectos y hongos.
Dejaremos que se depreden entre ellos y con los tratamientos ecológicos, intervendremos si vemos que se rompe un equilibrio que puede poner en peligro nuestros cultivos.